El yoga me cambió la vida, aprendí a ser consciente de mi respiración, a cuidar mi cuerpo, e ir a mi propio ritmo. En el 2016, mientras estudiaba en la Universidad de Piura probé mi primera clase de Power Yoga, al principio no lo entendía pero no dejé de ir porque después de cada clase me sentía más presente. Me convertí en una verdadera alumna y con ganas de saber más me lancé al profesorado de Power Yoga con Fred Busch en el 2020. Con todas las herramientas necesarias comencé a dictar, con mucha gratitud y emoción por compartir todo lo aprendido. La mejor parte de todo es disfrutar del camino, aprendiendo siempre y viendo las sonrisas de los demás después de Savasana.